lunes, 15 de enero de 2024

Oferta de empleo

¿Eres terapeuta en inglés y/o árabe? ¿Quieres formar parte de un equipo multilingüe de psicólogos/as?


Se buscan psicólogas y psicólogos únicamente para la prestación de servicios en árabe (Norte de África y/o Asia) y/o inglés con disponibilidad desde febrero 2024. Abstenerse si no se cumplen los requisitos.


Se valorarán especialidades en: intervención en crisis, terapia breve, trauma, ansiedad, duelo o violencia de género.


También se valorará la capacidad para impartir formación online sobre bienestar y mejora de la productividad.


Se ofrece contrato de prestación de servicios, sin cláusula de exclusividad.


Requisitos:

  • Psicólogos/as clínicos/as y/o generales sanitarios, con experiencia de al menos 3 años.

  • Alta en el Régimen de autónomos de la seguridad social.

  • Seguro de responsabilidad civil.

  • Habilitación para el ejercicio de la psicología clínica o general sanitaria en España.

  • Idiomas: mínimo C1 o equivalente para poder ejercer en Inglés y/o Árabe (Norte de África y/o Asia).


Presentación de candidaturas a través del servicio de empleo del correo s.iriarte@cop.es.



¡Muchas gracias  por difundir entre vuestros contactos que puedan estar interesados!

martes, 5 de mayo de 2020

Medidas prevención de la propagación del COVId-19 en el despacho


Desde la consulta de psicología hemos retomado nuestra actividad sanitaria presencial implementando el siguiente protocolo de prevención de la propagación del COVID-19 en el despacho, que recoge las medidas generales de protección frente al virus dictadas por el  Ministerio de Sanidad:

1.    Citación de las y los pacientes de forma escalonada para no coincidir con otras personas en la sala de espera.

2.    Recomendación de no llegar con más de 3 minutos de antelación para ocupar el menor tiempo posible en la sala de espera.

3.    Recomendación de abonar las sesiones de forma anticipada por transferencia bancaria para evitar el manejo de dinero físico. En todo caso, el cobro ya no se realizará por el servicio de secretaría, sino directamente por la psicóloga.

4.    Al entrar es obligatorio limpiarse las manos con el gel hidroalcohólico habilitado en el mostrador de entrada.

5.    Mantener el distanciamiento interpersonal de aproximadamente dos metros entre personas.

6.    Existe una mampara entre la entrada y el servicio de secretaría.

7.    Es obligatorio el uso de mascarilla durante toda la estancia en el gabinete.

8.    Entre cada paciente, la psicóloga ventila el despacho durante 5 minutos mientras que se desinfecta la mesa, sillas y pomos con una solución desinfectante de base amoniacal.

9.    Del mismo modo, en caso de necesitar material como bolígrafos, burbujas de relajación u otro material, estará previa y posteriormente desinfectado.

10.  La agenda de la terapeuta funciona como registro de uso de las dependencias en caso de que algún o alguna paciente nos informe de un caso confirmado  para informar a las personas que hayan podido coincidir con la persona infectada.

11.  En caso de sentir malestar, fiebre, u otros síntomas compatibles con COVID-19, no se debe acudir al despacho, pudiéndose sustituir de forma inmediata la consulta presencial por una consulta por video-conferencia.

12.  Aunque se facilitan justificantes de asistencia que permiten los desplazamientos fuera de las zonas confinadas, también existe la posibilidad de cambiar la consulta presencial por la virtual en todo momento.

13.  Hay dos aparcamientos a menos de 100 metros de la consulta, además de zonas de aparcamiento dentro de la zona SER que permiten evitar, en el caso que sea posible, el uso del transporte público.

14.  Recomendamos seguir en todo momento las recomendaciones y prescripciones del Ministerio y de la Consejería de Sanidad para evitar la propagación del COVID19 para lograr tener espacios seguros. 



sábado, 28 de diciembre de 2019

¿Cuáles son las urgencias psicológicas más frecuentes en este periodo de final de año?


Sin ser catalogadas como urgencias psicológicas, no es infrecuente que en las semanas previas a los periodos vacacionales o los días festivos, se produzca un incremento de las solicitudes de consulta probablemente debidas a la previsión de un aumento del tiempo no-estructurado, al incremento de contactos sociales o al contrario, por la ausencia de los encuentros que se perciben como normativos.

Episodios etiquetados por los manuales de diagnóstico (DSM-5 o el CIE-10) como depresivos, ansiógenos o mixtos, con todas sus especificidades (Fobia social, crisis de pánico, trastorno obsesivo compulsivo, anorexia nerviosa, bulimia nerviosa…) son los tres motivos más frecuentes de petición de cita. 

Los problemas de pareja o con las hijas e hijos también pueden requerir un consejo psicológico especializado. Máxime tras la evaluación escolar coincidente con el final del trimestre y con el deseo de comenzar un nuevo año mejor.

Otra de las posibles causas que motiva la petición de consulta es el incremento de síntomas del estrés que supone la acumulación de eventos vitales estresantes (AVE) en estas fechas. Entre estos AVE se incluyen las mismas vacaciones o periodos navideños...

Los AVE forman parte de una escala elaborada en 1967 por Thomas Holmes y Richard Rahe para identificar 43 eventos estresantes que se pueden dar en la mayor parte de las culturas y pueden causar enfermedad. Aunque algunos estudios han criticado la vigencia de la Escala en el siglo XX y su transculturalidad, persiste su utilidad para valorar el grado de estrés al que se expone una persona en concreto  y el grado de impacto psicológico percibido (“Condiciones psicométricas de la Escala de Acontecimientos Vitales Estresantes, Londoño y cols. En Actualidades en Psicología, 33 (126), enero-junio 2019, 83-96).

Uno de estos AVE puede deberse a la pérdida de un familiar o persona cercana, bien por accidentes o autolesiones. Según la revisión realizada por el doctor Dominique Savary en la Revista Medscape, el periodo de fin de año se asocia con un incremento de la mortalidad de los pacientes principalmente los que tienen padecimiento cardiovascular y, en especial los pacientes con enfermedades coronarias. En estos casos, está demostrado que la utilización de los servicios de un psicólogo o psicóloga especializado en emergencias psicológicas mejora la atención inmediata durante la urgencia, puede prevenir complicaciones posteriores y favorece una detección precoz de posibles factores de vulnerabilidad en el futuro de las personas cercanas al fallecimiento imprevisto.

Por último, es importante señalar que tanto la abstinencia como el consumo excesivo de alcohol u otras sustancias (ansiolíticos, cocaína, anfetaminas, cafeína, anticolinérgicos, alucinógenos, hormonas esteroideas o los simpaticomiméticos), incrementan igualmente las urgencias médicas y psicológicas.

Por mi parte, colaboro desde 2014 con el Servicio de Asistencia y Apoyo Psicológico de PsyFrance en la atención psicológica urgente de personas en riesgo psicosocial y en el acompañamiento de eventos vitales estresantes para dar respuesta a estas eventualidades.



miércoles, 25 de septiembre de 2019

Yo dudo, tú dudas, nosotras dudamos, ellos dudan, cuándo debo consultar a una psicóloga?



¿Cuántas preguntas podemos hacernos a lo largo de una hora? ¿Y del día? ¿En una semana, cuántas? ¿Y de una vida?

En general, la duda nos abre puertas que pueden ayudarnos a ver nuevas perspectivas, a solucionar problemas, porque al fin y al cabo, dudar  no es más que poner en suspensión juicios o decisiones. La Real Academia de la lengua española de forma más poética define a la duda como “la suspensión o indeterminación del ánimo”. ¿Pero, cuándo terminar con la suspensión y continuar el juicio o la decisión? “He aquí la cuestión, querido Hamlet”, se decía el propio Hamlet a sí mismo.

Algunas personas se deleitan en la reflexión y la duda, en ocasiones puede producir casi, un placer filosófico el tomarse el tiempo y la distancia para reflexionar y dudar.

En la mayor parte de las ocasiones, las consecuencias imprevistas o indeseadas a nuestras decisiones, nos abocan al replanteamiento y la duda, desde la psicología podemos definir estas situaciones como crisis. Pero las crisis es su sentido más estricto son situaciones concretas, puntos de inflexión que obligan al cambio.

En algunos momentos de nuestra vida, también, podemos tener las eternas dudas, lugares comunes y personas que van tomando el hábito o el vicio de dudar en temas recurrentes, en particular de lo que hacen. ¿Debería quedarme en este puesto de trabajo o arriesgarme y cambiar? ¿Soy feliz con mi pareja? Pero ¿ESTO ES REALMENTE LO QUE QUIERO?

Estas situaciones son las que requieren más tiempo de dilucidar, porque dependiendo de las motivaciones y definiciones del trabajo, en un momento dado podemos “querer de verdad” cambiar y en otras conservar. El ámbito de la felicidad es exponencialmente más complejo, ¿qué es la felicidad? ¿Qué me haría feliz ahora? ¿Y en media hora o diez años? ¿Soy lo suficientemente feliz de esta manera? Y esto de lo que ahora solo dudo, ¿será un problema a resolver en el futuro?

Y por último, existen dudas que son patológicas en cuanto al nivel de malestar que generan y la gravedad con que interfieren en varios ámbitos de nuestra vida (el personal, familiar, social, laboral o académico,...). Aunque pudieran surgir en un remoto inicio como bálsamo como calmar inquietudes, a lo largo del tiempo se convierten en un esquema aprendido que repite continuamente la suspensión, genera más ansiedad que la que calma, pudiendo acabar en un verdadero trastorno obsesivo, TOC, celotipia, hipocondría….

En los dos últimos tipos de dudas descritos, es pertinente acudir a la ayuda de un profesional de la conducta, como los psicólogos, para que nos acompañen en el proceso de desanudar las dudas, explicitar las emociones que las anudan y facilitar procesos que nos hagan más felices, sin duda.


Sandra Iriarte

jueves, 16 de mayo de 2019

Mi experiencia Creciendo VIH positiva

Mi experiencia Creciendo VIH positivo

Misericordia Ngulube


Haber vivido siempre con VIH me ha enseñado la importancia absoluta de aprender a amar y abrazar mi cuerpo.



El VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana) es simplemente un virus que intenta controlar el sistema inmunológico, y al hacerlo, si no se trata puede conducir al SIDA (Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida), un término general que se usa para definir un conjunto de síntomas que indican Que el sistema inmunológico ha sido destruido. 

El estigma del VIH a menudo transmite el mensaje de que las personas que viven con el VIH no son dignas de amor o aceptación. Para mí, darme cuenta de que el aspecto más importante del VIH era recordar que 'H' significa humano. Siempre me recuerda que, incluso frente al estigma, es una necesidad abrazarme y amarme a mí mismo.

El virus se puede controlar con un tratamiento a menudo denominado terapia antirretroviral (ARV) y esto significa que puedo esperar vivir tanto como una persona sin VIH, tener hijos que no sean VIH + y debido a 'U = U' - - una campaña que celebra que una 'carga viral indetectable' - significa que puedo descansar sabiendo que no puedo transmitirla.

Cuando me informaron que había nacido con VIH, el conocimiento de mi diagnóstico vino con el conocimiento y la protección de ser consciente de que la comunidad de la que sin saberlo había formado parte era "ajena" a la sociedad. La habitación en la que me dijeron que estaba, ya no existe, literal y metafóricamente hablando, tampoco existen las limitaciones del estigma como lo fueron entonces.

"Para mí, darme cuenta de que el aspecto más importante del VIH era recordar que 'H' significa humano".
El hecho de crecer con el VIH suele ser aislado, y se siente aún más en Gales, donde hay menos de 20 personas en todo el país que comparten su experiencia. Mi pregunta siempre ha sido: ¿por qué es tan importante que un virus intente atacar mi sistema inmunológico, por qué debería tener un impacto en quién soy y qué puedo hacer?

Solo cuando llegué a un acuerdo con el hecho de que el autoestigma no hacía absolutamente nada para servirme positivamente como persona, decidí pensar de manera diferente. Esto significó que, en lugar de vivir dentro de los límites que el estigma a menudo nos plantea, podría elegir vivir de manera diferente.

Nunca he olvidado estar en una reunión con otros jóvenes activistas, y uno de ellos dijo: “Si no hablamos de nuestras experiencias de vivir con el VIH, ¿por qué esperaríamos que otros supieran sobre ellos y por qué esperamos tener una ¿Voz? ”Entonces, en lugar de dejarme envolver por el silencio, decidí iniciar conversaciones que podrían llevar al cambio.

La mayor parte del estigma que rodea al VIH se debe a la falta de conocimiento sobre los hechos.La gente le teme a lo desconocido, es realmente tan simple, o simplemente es ignorante a propósito.Sin embargo, el verdadero aprendizaje comenzó cuando tuve que entender la brecha (que se ha convertido en algo por lo que estoy agradecido) entre amar mi activismo, que se centra principalmente en hacer de los jóvenes una prioridad y empoderarlos y aprender cómo empoderar a mí mismo. Un activista del VIH que vive abiertamente.

Nadie te da un manual para esto. Me encontraba rutinariamente frustrado cuando tenía proyectos, eventos y experiencias cuando estaba en la cima de mi juego, y llegaba a casa y, literalmente, no podía ni siquiera decir las tres letras "VIH". Tenía que entender que mi confianza y mi amor por la defensa no significaban necesariamente que tuviera confianza y amor por mí mismo.

Para mí, esto significa decir no a las cosas para las que simplemente no tenía energía, centrándome en proyectos de los que podría estar orgulloso y, lo que es más importante, me tomaba el tiempo regularmente para practicar el cuidado personal. Ahora, me he dado cuenta de lo importante que es que al aceptar mi diagnóstico de VIH, me he convertido en un mejor activista, amigo y persona. No ha sido un viaje lineal, pero se trata de tomar un día a la vez, respirar profundamente y el amor y el apoyo de quienes me rodean.


Mire la charla TEDxYouth @ BrayfordPool de Mercy 'Generación Y: con derecho a cambiar'para saber más acerca de lo que ella representa. Esta pieza fue publicada originalmente en BRICKS, No.6, The Body Issue.

viernes, 19 de abril de 2019

Jane Goodall: "Tenemos intelecto, pero ¿somos inteligentes?"

Ya en primero año de carrera, estudiando Etología, me enamoré de esta mujer.

Ahora con 85 años, Jane Goodal sigue transmitiendo su amor por los animales y la ecología. 

Me quedo con ésta frase "Y estoy convencida de que solo podemos alcanzar nuestro potencial humano cuando la cabeza y el corazón están en armonía".

https://youtu.be/DFEPiyRu3EU

jueves, 18 de abril de 2019

Fallece Paul Greengard "el hombre que descubrió el beso de la alegría"


El 13 de abril a sus 93 años de edad, nos dejó Paul Greengard, un hombre apasionante, físico, inconformista, lleno de creatividad, y que nos ha aportado a la Psicología la comprensión de los mecanismos neuroquímicos en la transmisión interneuronal.

Entre finales del siglo XX y principios del XXI, el Doctor Santiago Ramón y Cajal desarrolló la Doctrina Neuronal describiendo la forma y modos de conexión entre las neuronas. Por ello fue galardonado con el premio Nobel de Medicina en 1906. Ramón y Cajal llamaba "besos" a esta sinapsis y comunicación neuronal.

Durante más de 50 años, la mayor parte de la comunidad científica pensaba que estos "besos" eran básicamente eléctricos; sin embargo, un médico sueco, Arvid Carlson, había aislado e identificado a la dopamina como parte fundamental en la transmisión cerebral así como en el control de los movimientos. Y junto con él, nuestro hombre, Greengard, describió cómo la dopamina y otras moléculas funcionaban para lograr la transmisión neuronal.

Ya en el siglo XXI junto a quien relacionó los procesos neuroquímicos, la memoria y el aprendizaje, Eric Knadel, Arvid y Greengard compartieron el premio Nobel de Medicina en 2000.

El desarrollo del estudio de la dopamina, nos demostró que es un neurotransmisor presente en muchas áreas cerebrales y que tiene más funciones que la comunicación neuronal o los movimientos corporales. Simplificando muchísimo, la liberación de dopamina nos da placer y nos refuerza a repetir comportamientos. Por eso, en la terapia, es imprescindible tener en cuenta cómo puede actuar en las diferentes personas y sus comportamientos.

Si os apasiona tanto como a mí, la relación entre la física, la historia y la psicología, os invito a leer un buen artículo que desarrolla las principales aportaciones de Paul Greengard. Lo escribió el periodista científico Manuel Ansede ayer en El País, de donde he tomado la fotografía de Greengard.